A Dios sea la gloria

B39 C34 CB39 E39 G39 K34 P28 R31 S25 T39
1
A Dios se͡a la gloria,
Grandezas obró,
Amó tanto͜ al mundo
Que͜ a Su͜ Hijo nos dio;
Rindió El Su vida,
Ganó redención,
La puerta͜ a la vida
A todos abrió.
 
¡Alabad al Señor!
¡Tierra, oíd Su voz!
¡Alabad al Señor!
¡Alegraos hoy con Dios!
Lleguemos al Padre
Por Su͜ Hijo Jesús,
¡Y dadle la gloria,
Por Su͜ obra͜ en la cruz!
2
Oh, qué redención: con
Su sangre compró
A cada creyente.
¡Promesa de Dios!
Si͜ en Cristo confía͜ el
Más vil pecador,
Perdón en el acto
Le͜ otorgó͜ el Señor.
3
¡Oh, qué maravillas,
Las obras de Dios!
Hay gran regocijo
Por Su͜ Hijo Jesús;
Más puro, más bello,
Más grande será,
Cuando le veamos
Nos transportará.
6
Un Hermano

Esta persona maravillosa, el Dios Triuno que al encarnarse se corporificó como hombre, se ha expandido, aumentado y agrandado. En esta expansión y agrandamiento, Cristo ha llegado a ser el tabernáculo, la morada de Dios. Por ser tal tabernáculo, podemos entrar en Él.

Cuando Dios estaba únicamente en Cristo, nadie más podía entrar en Él. Si Cristo no se hubiera expandido, nadie habría podido entrar en Dios. Pero ahora, al expandirse y venir a ser un tabernáculo, Cristo no es únicamente la morada de Dios, sino también el lugar donde nosotros podemos entrar en Dios. Hoy podemos entrar en Dios, tomando a Cristo como nuestra vida, a fin de que Él sea quien le da sentido a nuestra vida. Al ser Él nuestra vida y quien le da sentido a nuestra vida, Él es nuestro testimonio. Nosotros le vivimos, expresamos y exhibimos en todo aspecto y en todo sentido. Entonces, de manera espontánea Él llega a ser nuestro centro. Por consiguiente, hoy Cristo es quien le da sentido a la vida, nuestro testimonio y nuestro centro.

Estudio-vida de Números

mensaje 2 (LSM)

Los salmistas disfrutaron a Dios por medio del Cristo sufrido, exaltado y reinante. Tal Cristo es el camino para que nosotros los pecadores entremos en Dios. Ahora disfrutamos a Dios como nuestro Dios en Cristo, el hogar y en la iglesia, la ciudad. El disfrute que tenemos de Dios lo recibimos por medio de una escalera, y esta escalera es Cristo: el sufrido, el exaltado y el reinante. En el libro segundo de los Salmos se recalca el sufrimiento de Cristo, la exaltación de Cristo y el reinar de Cristo.

Estudio-vida de los Salmos

Mensaje 19 (LSM)


Alejandra Raquel Salazar Guerrero

Xiloxoxtla, Tlax., Mexico

Albar al Señor amén


Daniel Ojeda Rivero

Dios amo al mundo (Jn 3:16), a la iglesia (Ef. 5:25) , y a mi (Ga 2. 20b), aleluya por su amor


Hna. Gabriela Menez López

Ciudad De México, Localidad Del Valle, Mexico

A Dios sea la gloria, grandezas obró. Amo tanto al mundo que a Su HIjo nos dio; rindió el Su Vida, ganó redención, la puerta a la vida a todos abrió. Oh Señor Jesús, Tu tienes las llaves de David!! Gracias que has abierto las puertas. Juan 1:12 Más a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio autoridad de ser hechos hijos de Dios. “ Llegar a ser hijo de Dios es poseer la vida y la naturaleza divina. Por tanto de la manera que habéis recibido al Cristo , a Jesús, andad en El.


David Mora

Sacramento, CA, United States

Amen.. Gracias


Silverio Cardenas Jr.

¡Gracias por este excelente himno!