Te bendecimos, Padre

B48 C45 CB48 D48 E48 K45 P33 R38 S29 T48
1
Te bendecimos, Padre,
Con gozo celestial,
Pues con Tu Hijo͜ Amado
Está nuestro lugar.
El vive como͜ un Hombre
Delante de Tu faz,
En gloria͜ inmarcesible,
En Tu͜ amor eternal.
2
Su Padre͜ y nuestro Padre,
Su Dios y nuestro Dios;
A Ti el buen Amado
Te da satisfacción.
Con gozo El nos lleva
A compartir Tu͜ amor,
El brillo de Tu rostro,
Tu gracia͜ y Tu favor.
3
Tu͜ amor que nos envuelve
Jamás se͜ enfriará;
En El Tu͜ amor se centra,
Y Tu favor nos das.
En El Tu͜ amor y gloria
Encuentran su lugar,
Y todos Sus hermanos,
Tus hijos, dulce͜ hogar.
4
Un Hermano

Mateo 11:25 al 27 dice: En aquel tiempo, respondiendo Jesús, dijo: Te enaltezco, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios y entendidos, y las revelaste a los niños. Sí, Padre, porque así te agradó. Todas las cosas me fueron entregadas por Mi Padre; y nadie conoce plenamente al Hijo, sino el Padre, y nadie conoce plenamente al Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar.

El Señor reconoció con alabanzas el camino que el Padre había escogido para llevar a cabo Su economía. A pesar que la gente le calumnió (vs. 16-19) en vez de responder a Su ministerio, y pese a que las ciudades principales le rechazaron (vs. 20-24), El enalteció al Padre, reconociendo Su voluntad. No buscó prosperar en Su obra sino que buscó la voluntad del Padre; Su satisfacción y Su descanso no radicaban en que el hombre le comprendiera y le acogiera, sino en que el Padre lo conociera (vs. 26-27).

Nota 2 de la Versión Recobro de Mateo 11:25 (LSM)


Elizabeth Villarreal De La Rosa

Monterrey, Nuevo Leon, Mexico

Tu͜ amor que nos envuelve

Jamás se͜ enfriará;

En El Tu͜ amor se centra,

Y Tu favor nos das.

En El Tu͜ amor y gloria

Encuentran su lugar,

Y todos Sus hermanos,

Tus hijos, dulce͜ hogar.


Paula Lozano

Monterrey, Nuevo Leon, Mexico

Que Su amor nos envuelva es tanto rico como dulce y maravilloso, yo he sentido Su abrazo maravilloso en Su amor envolvente guaicas Mi Señor y Mi Dios, amén.


Anibal Marcial

Ciudad De México, Distrito Federal

Que Dios nos agracie significa que Él nos ha puesto en una posición de gracia a fin de que seamos el objeto de Su gracia y favor, esto es, que disfrutemos de todo lo que Dios

es para nosotros—Ef. 1:6b