1
Tu͜ amor, Jesús, excede mi pensar,
Pero mi alma quiere comprobar,
El largo,͜ el ancho͜ y la profundidad,
Su͜ altura͜ y fuerza quiere disfrutar
Aún más y más.
Pero mi alma quiere comprobar,
El largo,͜ el ancho͜ y la profundidad,
Su͜ altura͜ y fuerza quiere disfrutar
Aún más y más.
2
Tu͜ amor, Jesús, excede todo͜ hablar,
Mi Salvador, mas quiero proclamar,
A pecadores en cualquier lugar
Tu͜ amor que puede el temor echar
Con su poder.
Mi Salvador, mas quiero proclamar,
A pecadores en cualquier lugar
Tu͜ amor que puede el temor echar
Con su poder.
3
Tu͜ amor, Jesús, excede todo͜ honor,
Pero mi corazón, oh Salvador,
Quiere cantar Tu rico͜ y tierno͜ amor
Que trae a este pobre pecador
Cerca de Dios.
Pero mi corazón, oh Salvador,
Quiere cantar Tu rico͜ y tierno͜ amor
Que trae a este pobre pecador
Cerca de Dios.
4
Aunque Tu͜ amor no pueda comprender,
Hablar, cantar, o͜ a fondo conocer,
Mi vaso traigo libremente yo
Para que Tú, fuente de vida, lo
Puedas llenar.
Hablar, cantar, o͜ a fondo conocer,
Mi vaso traigo libremente yo
Para que Tú, fuente de vida, lo
Puedas llenar.
5
Un vaso soy, vacío͜ y sin calor,
Jamás te di ni͜ un rasgo de mi͜ amor,
Mas puedo una͜ y otra vez venir
Con la certeza de saber que͜ aún
Me amas Tú.
Jamás te di ni͜ un rasgo de mi͜ amor,
Mas puedo una͜ y otra vez venir
Con la certeza de saber que͜ aún
Me amas Tú.
6
¡Oh, lléname, Jesús, mi Salvador!
Al manantial me guíes con Tu͜ amor,
Con fe sencilla͜ allí acudiré,
Jamás a otra fuente yo iré,
Mas sólo͜ a Ti.
Al manantial me guíes con Tu͜ amor,
Con fe sencilla͜ allí acudiré,
Jamás a otra fuente yo iré,
Mas sólo͜ a Ti.
7
Señor, cuando Tu rostro pueda ver
Y en Tu trono pueda comprender
El largo,͜ el ancho͜ y la profundidad,
La͜ altura͜ y fuerza de Tu͜ amor leal,
Yo cantaré.
Y en Tu trono pueda comprender
El largo,͜ el ancho͜ y la profundidad,
La͜ altura͜ y fuerza de Tu͜ amor leal,
Yo cantaré.
Delete Comment
Are you sure you want to delete this comment?
Como Espíritu que mora en nosotros,
nos fortalece
(por medio de la impartición divina)
en nuestro hombre interior
El Espíritu vivificante, el Espíritu compuesto, el Espíritu todo-inclusivo, es el Espíritu que mora en nosotros, quien nos fortalece (por medio de la impartición divina) en nuestro hombre interior para que Cristo haga Su hogar en nuestros corazones, a fin de que seamos plenamente capaces de aprehender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la altura y la profundidad, para que seamos llenos hasta la medida de toda la plenitud de Dios, la cual es la iglesia (Ef. 3:16-19). En Efesios 3:16 Pablo oró pidiendo que Dios nos fortaleciera en nuestro hombre interior por Su Espíritu. Vivir en el hombre exterior no requiere que nosotros hagamos nada. Cada mañana cuando nos levantamos estamos en el hombre exterior. Si no velamos, nos quedaremos en el hombre exterior todo el día. Nosotros hablamos en el hombre exterior, nos reímos en el hombre exterior, expresamos nuestra actitud en el hombre exterior; todo lo hacemos en el hombre exterior. No somos más que el hombre exterior. Pero nosotros debemos vivir en el hombre interior. Sin embargo, esto puede ocurrir sólo si entramos en nuestro hombre interior. Según Efesios 3:16, la manera de entrar en el hombre interior es ser fortalecidos por el Espíritu. El Espíritu nos fortalece en nuestro hombre interior.
Cuando tenemos nuestra vigilia matutina y experimentamos un avivamiento matutino, estamos en el hombre interior. Antes de eso es posible que hayamos deseado discutir con alguien en nuestro hombre exterior; pero después de diez minutos estábamos en el hombre interior al haber sido fortalecidos por el Espíritu. No obstante, después de diez minutos quizá estemos de nuevo en el hombre exterior. En ese momento necesitamos orar. Es por eso que la Biblia nos dice que oremos sin cesar (1 Ts. 5:17). Sólo orar e invocar el nombre del Señor pueden fortalecernos en el hombre interior y guardarnos en el hombre interior. Este tipo de fortalecimiento también es una impartición; imparte el elemento divino en nuestro ser y nos fortalece en nuestro hombre interior para que Cristo haga Su hogar en nuestros corazones. Cristo está en nuestro espíritu; pero Él necesita extenderse de nuestro espíritu a nuestro corazón para poder hacer Su hogar allí a fin de que nosotros seamos plenamente capaces de aprehender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, es decir, las dimensiones de Cristo. Necesitamos conocer a este Cristo ilimitado para ser llenos hasta la medida de la plenitud de Dios. Aquí la plenitud simplemente significa la manifestación, la expresión, de Dios, la cual es la iglesia. La iglesia es la expresión de Dios. Cuando Cristo haga Su hogar en nuestros corazones, podremos conocer las dimensiones de Él. Entonces seremos llenos hasta la medida de la plenitud de Dios. Esto se lleva a cabo exclusivamente por la impartición interior del Espíritu. Primero, el Espíritu nos fortalece en el hombre interior; luego, el Espíritu nos fortalece para que Cristo haga Su hogar en nuestro ser, haciéndonos la expresión de Dios a fin de que Dios sea plenamente expresado.
La Línea central de la
revelación divina:
Mensaje 11 (LSM)
Ciudad De Mexico, Cdmx, Mexico
Tú amor , Jesús, excede todo hablar,
Mi Salvador, mas quiero proclamar,
A pecadores en cualquier lugar
Tu amor que puede el temor echar
Con su poder!!
Fil 3:10 A fin de conocerle, y el poder de Su resurrección, y la comunión en Sus padecimientos, configurándose a Su muerte.
Efesios 1:19-20 poder cuádruple.
La realidad de el poder de la resurrección
de Cristo es el Espíritu .
Rom 1:4-5 que fue designado Hijo de Dios con poder, según el Espíritu de santidad, por la resurrección de entre los muertos, Jesucristo nuestro Señor y por quien hemos recibido la gracia y el apostolado, para la obediencia de la fe entre todos los gentiles por causa de Su nombre. ¡Oh Señor Jesús!! Te Amo!
La esencia divina de Cristo, Dios el Espíritu mismo. (Juan 4:24), es decir, la divinidad de Cristo, está constituida de santidad y está llena de la naturaleza y de la cualidad de ser santo!!! Aleluya!!
Ciudad De Mexico, Cdmx, Mexico
Oh! Lléname , Jesús, Mi Salvador!!
Al Salvador Me guíes con tu amor!
Con fe sencilla, allí acudiré,
Jamás a otra fuente yo acudiré
Más solo a Ti. Bendito Eres que fluyes del Trono de Dios y del Cordero. Te Alabo y te amo!! Llena toda la Ciudad, el Templo Santo, La Tierra Santa. La Nueva Jerusalén.
Señor cuando Tú rostro pueda ver
Y en Tú trono pueda comprende
El largo, el ancho y la profundidad,
la altura y fuerza de Tu amor leal
Yo cantaré. Jn 1:18 A Dios nadie lo vio jamás, el unigénito Hijo que está en el Seño del Padre, el le ha dado a conocer!! Bendito Eres que a través del Hijo podemos ver el brillo de Tu rostro, Tú gracia y Tú favor!! Deseamos Tu sonrisa!!
México, Ciudad De México, Mexico
Tú amor Jesús, excede todo hablar,
Mi Salvador mas quiero proclamar
A pecadores en cualquier lugar
Tú amor que pueda el temor echar
Con Su poder. Bendito Eres Padre, que nos has hablado en el Hijo a quien has constituido heredero de todas las cosas en el Universo!! (Heb 1:2-3 )Tú amor Jesús, excede todo honor, gracias que traes a este pecador cerca de Dios!! Solo Tu Eres. La justicia, santidad y Tú gloria satisfacen los justos requisitos de Dios!! Bendito Eres que somos esos vasos de barro, gracias que nos transformas y conformas a la imagen de tu Hijo! 2a Co 3:18!! TE AMO!! Aleluya!!!
Un vaso soy, vacío͜ y sin calor,
Jamás te di ni͜ un rasgo de mi͜ amor,
Mas puedo una͜ y otra vez venir
Con la certeza de saber que͜ aún
Me amas Tú.