¡Despiértate alma! Ven

1
¡Despiértate͜ alma! Ven,
Sacude tu temor;
Un sacrificio hay
Sangrando͜ a tu favor.
 
Está͜ en el trono mi Fiador,
Comprado fui por Su dolor,
Comprado fui por Su dolor.
2
En lo͜ alto vive El,
Intercediendo͜ está;
Su͜ amor redimidor,
Su sangre eficaz.
 
Por nuestra raza El sangró,
Rociando͜ el trono de mi Dios,
Rociando͜ el trono de mi Dios.
3
Cinco heridas son
Las que sufrió por mí,
Ardiendo͜ en oración
Están rogando͜ así:
 
“Perdónale”, es su clamor,
“¡Se redimió͜ ese pecador!”
“¡Se redimió͜ ese pecador!”
4
El Padre͜ escucha͜ orar
Al Hijo de Su͜ amor;
No se puede͜ apartar
De͜ Aquel a quien ungió.
 
Su͜ Espíritu me confirmó:
“Nacido eres tú de Dios”,
“Nacido eres tú de Dios“.
5
¡Qué reconciliación!
Me perdonó mi Dios.
Su hijo͜ ahora soy,
No tengo más temor.
 
Me͜ acerco con confianza͜ y paz,
Y Abba, Padre͜ es mi clamar,
Y Abba, Padre͜ es mi clamar.
3
Un Hermano

h. Puede salvar por completo a los que por Él se acercan a Dios, puesto que vive para siempre para interceder por ellos

Hebreos 7:25 dice que Cristo puede “salvar por completo a los que por Él se acercan a Dios, puesto que vive para siempre para interceder por ellos”. Aquí la expresión por completo significa “íntegramente, enteramente, perfectamente, hasta el fin y por la eternidad”. Esto indica que Cristo como nuestro Sumo Sacerdote puede salvarnos al máximo, es decir, puede salvarnos en toda clase de situación y condición.

Él puede salvar por completo a los que por Él se acercan a Dios, puesto que Él vive para siempre para interceder por nosotros. Cristo como nuestro Sumo Sacerdote toma nuestro caso al interceder por nosotros. Él se presenta delante de Dios a nuestro favor y ora por nosotros para que seamos salvos y participemos plenamente en el propósito eterno de Dios. Debemos creer en el hecho de que Cristo siempre intercede por nosotros. Al interceder por nosotros, Él nos cuida. Él nos puede cuidar mucho mejor que lo que nosotros podemos cuidarnos a nosotros mismos. La mayor parte del tiempo somos insensatos en la manera en que cuidamos de nosotros. En lugar de intentar cuidarnos a nosotros mismos por nuestros propios esfuerzos, simplemente debemos entregarnos a Él y descansar, sabiendo que Él siempre cuida de nosotros.

1) Puede salvar por completo

El versículo 25 dice que Cristo puede salvar por completo. Debido a que Él vive para siempre y es inmutable, Cristo puede salvarnos por completo en cuanto a extensión, tiempo y espacio. Por tanto, Su salvación se extiende al máximo.

Cristo puede salvarnos por completo debido a que Él vive no solamente en los cielos, sino también dentro de nosotros. Al mismo tiempo que Él vive en los cielos, Él se transmite a nuestro ser. Él vive en los cielos para interceder por nosotros y cuidar de nuestro caso, pero la realidad de todo esto es transmitida a nuestro espíritu por Su Espíritu. Tenemos que aprender a ver esta visión celestial y disfrutar a nuestro Sumo Sacerdote. Entonces recibiremos misericordia y hallaremos gracia en el trono de la gracia para el oportuno socorro. Seremos librados y salvos por completo. En esto consiste la obra de nuestro divino Sumo Sacerdote.

La Conclusión del

Nuevo Testamento:

Mennsaje 375 (LSM)


Javier Alvarado

Puyo, Pastaza, Ecuador

Este himno escrito por Charles Wesley muestra los sufrimientos de nuestro amado Señor Jesús cuando estaba en esa cruenta Cruz, orando Padre perdonalos porque no saben lo que hacen y las 5 heridas que marcaron su cuerpo son:

1. La corona de espina sobre sus dientes.

2. Los clavos en sus pies

3. Los clavos en sus manos

4. Los 40 azotes menos uno

5. Su costado herido por la lanza del soldado romano.


Gustavo Adolfo Lorza

Jamundí, Valle Del Cauca, Colombia

la nueva creaciÓn en cristo llega a ser la justicia de dios por medio del 2° paso de la reconciliaciÓn