Miles de voces van proclamando

C110 CB127 E127 G127 K110 P62 R94 S66 T127
1
Miles de voces van proclamando
A una voz, “¡Cordero de Dios!”
Miles de santos van respondiendo
Dándole eco͜ a su clamor.
2
Resuena͜ el cielo, “¡Gloria͜ al Cordero!”,
Todos le rinden esta canción;
Con voz potente participando
En Su͜ eternal adoración.
3
Esta͜ alabanza como͜ el incienso
Asciende͜ al trono del Padre Dios;
Todos se͜ inclinan a Jesucristo,
Todas sus mentes una son.
4
Por Su consejo͜ el Padre reclama:
Dadle al Hijo͜ el mismo honor;
Toda la gloria de Dios el Padre
Expresa͜ el Hijo͜ en Su͜ esplendor.
5
Huestes del cielo frente͜ al Cordero,
Por el Espíritu del Señor
Son coronados con luz y gozo,
Para͜ alabar al gran “YO SOY“.
6
Descansa hoy sin ningún estorbo
La jubilosa nueva cre͡ación,
Tan bendecida en Jesucristo
Por Su completa salvación.
7
Desborda͜ el cielo con alabanzas
Por la creciente͜ eterna canción;
“¡Amén!” resuena por todo͜ el orbe,
“¡Amén!” responde la cre͡ación.
4
Un Hermano

Isaac tipifica a Cristo

Isaac tipificaba a Cristo. Ya dijimos que Abraham respondió al llamado de Dios al ir al monte Moriah para ofrecer a Isaac. Eso es historia. Pero si vemos esto desde la perspectiva de la revelación de Dios, veremos que lo que hizo Abraham con Isaac es un cuadro gráfico de lo que el Padre hizo con Su Hijo amado. Cuando Abraham viajó al monte Moriah con Isaac, lo acompañaron dos siervos jóvenes. Al tercer día, Abraham se alejó de los dos siervos, diciendo: “Yo y el muchacho iremos hasta allí y adoraremos, y volveremos a vosotros” (v. 5). De ahí en adelante, la historia cambia. Ya no era la historia de cuatro personas: el padre, el hijo y los dos siervos, sino la historia de Abraham y su hijo Isaac. Abraham tomó la leña para el holocausto y la puso encima de Isaac, quien la cargó hasta la cima del monte Moriah. Compare esto con Juan 19:17, donde leemos: “Y El, cargando Su cruz, salió al lugar llamado de la Calavera, y en hebreo, Gólgota”. Isaac recorrió el mismo camino al monte Moriah que el Señor Jesús recorrería más tarde al subir al Gólgota. Antes de que Cristo llevara la cruz y subiera al Calvario, O el Gólgota, Isaac cargó la leña para el holocausto y siguió el mismo camino. Además Jesús fue crucificado en el monte donde Isaac fue puesto en el altar. Por consiguiente, vemos que Abraham tipificaba al Padre, e Isaac, con la madera sobre sí, al Hijo unigénito de Dios. Isaac fue llevado como cordero al altar. Jesús también “como cordero fue llevado al matadero” (Is. 53:7).

Isaac es reemplazado

por un carnero

Isaac fue reemplazado por un carnero, es decir, un cordero. Leamos el versículo 13: “Entonces alzó Abraham sus ojos y miró, y he aquí a sus espaldas un carnero trabado en un zarzal por sus cuernos; y fue Abraham y tomó el carnero, y lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo”. Aquí vemos que el hijo no fue inmolado, sino el carnero, el cordero. ¿Quién fue inmolado en la cruz, el Hijo de Dios O el Cordero de Dios? Fue el Cordero de Dios. Cristo es el Hijo de Dios, pero cuando fue inmolado en la cruz, fue reemplazado por el Cordero de Dios. Juan 1:14 habla del Hijo de Dios y dice: “Contemplamos Su gloria, gloria como del Unigénito del Padre”. Sin embargo, Juan 1:29 dice: “¡He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo! ” Aquí vemos que el Hijo de Dios fue reemplazado por el Cordero de Dios. El Cordero de Dios fue crucificado, y no el Hijo de Dios. En la crucifixión, el Hijo fue reemplazado por un carnero.

Estudio-vida de Génesis

Mensaje 58 (LSM)


匿名

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, Mexico

El gran yo soy antes que Abraham fuese YO SOY.


Eva Edith Reyes Pérez

Aleluya porque en la cruz y por su muerte, nto señor Jesús precioso logró obtener esta nueva creación, la iglesia, su obra maestra. Efesios 2:10.


匿名

Precioso, precioso, precioso Señor, precioso Dios, precioso Cristo!